Kei y Masaro son atropellados por un tren. Lo siguiente que perciben es que se encuentran en una habitación, rodeados de otros, y ante ellos hay una enorme esfera que domina el lugar y les convoca a participar en un siniestro juego. Nunca habíamos presenciado un purgatorio de esta índole: con atuendos y armas especiales, los protagonistas deberán hacer frente a diversas amenazas. El triunfador obtendrá un galardón muy valioso: la oportunidad de regresar a la vida.