Gene Watson (Johnny Depp), un contable solitario, y su hija de seis años son raptados en la estación de tren de Los Ángeles por unos falsos agentes de policía. Los captores le proporcionan a Watson un arma y le imponen la tarea de llevar a cabo un asesinato en un tiempo límite de noventa minutos, si desea salvar la vida de su hija.